En un equipo de pruebas de software, no basta con decir “soy tester”. El proceso de testing implica múltiples actividades que requieren roles definidos. Según el ISTQB, estos roles son clave para asegurar que las pruebas se realicen con calidad, estrategia y efectividad.Entender estos roles no solo mejora la colaboración, sino que permite escalar procesos, mejorar tiempos y optimizar recursos.
El ISTQB define dos roles principales dentro del proceso de pruebas:
Dependiendo del proyecto, una persona puede asumir ambos, o estos pueden estar distribuidos en diferentes perfiles.
Responsable del liderazgo del proceso completo de testing. Este rol puede recaer en perfiles como el jefe de pruebas, líder técnico o incluso un scrum master en contextos ágiles.🔹 Actividades principales:
📌 Ejemplo: Un jefe de pruebas organiza las actividades para un ciclo de regresión, asigna recursos, revisa el avance y reporta al cliente.
Responsable de las actividades de ingeniería y ejecución de pruebas. Suele ser asumido por testers, analistas funcionales, automatizadores o ingenieros de calidad.🔹 Actividades principales:
📌 Ejemplo: Un tester crea casos de prueba para validar la lógica de facturación en un sistema ERP y automatiza los más repetitivos con Cypress.
En contextos más complejos, entran en juego otros perfiles esenciales:
En testing, el rol no siempre coincide con el cargo. Una misma persona puede:
Lo importante es que las responsabilidades estén claramente definidas y bien comunicadas.
Conocer quién hace qué en testing es clave para que el proceso fluya, la calidad sea constante y los errores no se repitan. Implementar una buena estructura de roles permite detectar cuellos de botella, evitar reprocesos y lograr resultados alineados con los objetivos del negocio.No se trata de jerarquías, se trata de responsabilidades claras.